Si el verano es siempre el momento de mayor demanda del año en el aeropuerto de la capital, este año está resultando especialmente bueno. Las solicitudes de aterrizajes y despegues han hecho necesario activar la segunda pista con más frecuencia que en las temporadas anteriores. De manera que ambas estarán operativas –a la vez– todos los domingos y lunes del mes, que son las jornadas en las que se producen los mayores picos de tráfico aéreo, según confirmaron fuentes aeroportuarias.
Las mismas fuentes explicaron que este recurso se pone en servicio en función de la demanda, pero también para el entrenamiento de los colectivos implicados (controladores, técnicos, servicios de emergencias, etc), de manera que se mantengan familiarizados con los procedimientos. En cambio, durante el resto del año permanece cerrada la mayor parte del tiempo, dado que la demanda se puede servir con una sola pista, y de esta forma se reducen los costes operativos.
Disponer de una segunda pista permite, en los momentos de mayor congestión, casi duplicar el número de operaciones, hasta un máximo de 72 aeronaves entrando y saliendo cada hora, según los datos de Aena (ahora son 37). De esta forma, se puede ampliar el horizonte de destinos que están directamente conectados con Málaga (120 en la actualidad)e incrementar la llegada de turistas por vía aérea. Junto a la terminal T-3, este recurso permite atender hasta 9.500 viajeros cada hora (30 millones al año)
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