ARCUSVES DENUNCIA EL ESTADO DEL EREMERITORIO MOZARABE

Cuando la invasión islámica llegó a Churriana, se produjo un auge de los ermitaños o eremitas (de ahí viene la palabra ´ermita´). En nuestra barriada pueden localizarse en nuestros días hasta una quincena de conjuntos rupestres, pequeñas cuevas que sirvieron de refugio a estos religiosos cristianos.

El conjunto más metido en el casco urbano se encuentra en la calle Maestro Vert, en la zona de Hacienda Platero. Protegido por una valla a finales de los 90, cuenta con protección arquitectónica de primer grado o total en el PGOU. Pero ni el ordenamiento ni las vallas frenan su deterioro.

La asociación de vecinos de Churriana denunció ayer el alarmante estado de abandono de este refugio de ermitaños utilizado hace 14 siglos. "Las casas que hay detrás ya han denunciado en el distrito los problemas de humedad que tienen. Además las lluvias han hecho que se desprenda parte del techo y hay suciedad y grafitis", denunció la presidenta vecinal, Inmaculada Viñolo.

Por otra parte, resaltó que esta pequeña cueva sirve de refugio a los niños, que corren un serio riesgo con estos desmoronamientos. De hecho, ayer, en el día de la visita, podía verse un balón hinchable al fondo de la cueva.

Viñolo pidió al Ayuntamiento que proteja este conjunto rupestre colocando un tejado que elimine el riesgo de las lluvias y además que limpie de basura y grafitis la zona.

Por otro lado, responsabilizó a la Junta y al Ayuntamiento del mal estado de la cueva, al considerar que "la Junta tiene las competencias culturales pero es el Ayuntamiento el que tiene que proteger este espacio y el que debería implicarse en la limpieza y el mantenimiento".

Un portavoz de la Delegación de Cultura de la Junta contestó que, al contar con protección arqueológica municipal, "la Junta no tiene ningún tipo de competencias y la custodia siempre es responsabilidad del Ayuntamiento".