Comienza la cuenta atrás para la Ryder Cup 2010.
Miguel Ángel Jiménez, número 23º de la Race to Dubai, vuelve al ´tajo´, lo mismo que un nutrido grupo de españoles.
Este torneo marca el comienzo de los 365 días que van a decidir con qué equipo va a competir Europa en el recorrido Twenty Ten, del Celtic Manor Resort de Gales, del 1 al 3 de octubre. El capitán Colin Montgomerie aseguraba hace poco que él ya tiene una lista de posibles candidatos guardada bajo llave. Y estar en ella es el objetivo de Jiménez.
Sus números.
El churrianero es un ejemplo de tesón y regularidad.
Durante el verano se le ha visto muy fino y en la recta final de la temporada pueden llegar grandes resultados todavía.
En los últimos 20 años (desde 1990), ha finalizado entre los 25 primeros del ránking europeo en 15 ocasiones.
En todo este tiempo logró sus 15 victorias en el circuito, un registro al alcance de muy pocos.
El mérito de Jiménez es estar siempre ahí, mantener un nivel muy alto año tras año.
No hay un ´grande´ ni una Orden de Mérito en su palmarés, pero su carrera no tiene desperdicio.
Desde que hizo su debut puntual en 1983, ha disputado 505 torneos en el circuito europeo (cumplió la redonda cifra de 500 en el pasado Open de Francia).
A esas 15 victorias hay que unir la friolera de 107 puestos en ´top-ten´.
En total, 122 veces entre los diez primeros en este tiempo.
Pero esto no acaba aquí.
Se ha metido en cinco temporadas entre los cinco primeros del ránking, demostrando que lo suyo no es cuestión de rachas, más bien de regularidad: años 94, 98, 99, 2004 y 2008.
Pese a todos estos datos, quizá lo más sorprendente es que con un vistazo a sus números, se ve que su nivel no baja.
Y esa es la mejor noticia para afrontar su próximo reto, la Ryder de Gales.
Esta temporada, una vez cumplidos los 45 años en enero, volvían a saltar esas dudas que le persiguen desde hace tiempo sobre si mantendría el nivel.
Jiménez comenzaba con dos ´top-ten´ en Qatar (5º) y Dubai (7º).
Luego tuvo un bajón e incluso falló el corte en el Open USA, pero remontó y acabó 36º en el PGA, además de hacerse con otros dos ´top-ten´ (Múnich y Bridgestone).
Ha jugado ya 20 torneos y en la mitad de ellos ha quedado por encima del puesto 20.
Hay quien todavía se resiste a incluirlo entre los grandes de este deporte.
Pero sus números son su mejor aval.
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