Hoy puede ser un día clave para que se resuelva el problema
que existe en el aeropuerto entre los taxistas de Málaga y los del resto de la
provincia. Para bien o para mal, porque si la propuesta que ponga sobre la mesa
la Junta de Andalucía no satisface a los profesionales de la capital no
tardarán en convocar una asamblea con un único punto en el orden del día: hacer
huelga en el aeródromo en pleno mes de julio. Con este as en la manga acudirán
a la reunión prevista a las once de la mañana con el director general de
Movilidad, José Luis Ordóñez, que tendrá lugar en Sevilla y a la que también
asistirán representantes del resto de ciudades andaluzas con aeropuerto
(Sevilla, Granada, Almería y Jerez). Todos con los mismos intereses: derogar o
al menos dejar bajo mínimos el decreto autonómico que desde 1985 permite que,
bajo precontratación, cualquier profesional de otro municipio e incluso de otra
provincia pueda recoger clientes del aeropuerto. Frente a ellos, los
profesionales de los pueblos, que lógicamente defienden que el decreto continúe
tal y como está. En medio, la Consejería de Fomento con el difícil reto de
contentar a unos y a otros. Prueba de ello es que la propuesta planteada por la
Junta el pasado mes de abril (consistente en limitar los viajes de los pueblos
al aeropuerto a un servicio al día fuera de la temporada alta) fue rechazada
por ambas partes.
En un principio, dado que la eliminación del decreto está
prácticamente descartada al igual que su propuesta de que los taxistas de los
pueblos solo operen cuando los de la capital no den abasto, la primera opción
que estarían dispuestos a contemplar pasaría por limitar las precontrataciones
a determinados periodos vacacionales como agosto o Navidad. «Si no se puede
derogar, lo que planteamos es una modificación que en la práctica suponga su
anulación durante la mayor parte del año», expuso a este periódico el
presidente de la Asociación de Autónomos (Aumat), José Antonio Maté.
La otra posibilidad que «el sector en Málaga sí que podría
valorar» es que la Consejería de Fomento apruebe la reciprocidad (que los de la
capital puedan operar también en el resto de la provincia), una medida que
consideran como «un paso intermedio hacia la derogación». Todo ello, en un
contexto en el que la Junta tiene previsto establecer en el futuro zonas de
prestación conjunta en las áreas metropolitanas.
En cualquier caso, lo que sí que tienen claro los
profesionales de las capitales aeroportuarias es que la negociación entre todas
las partes no se debe prolongar más. «Ya no pueden marear más la perdiz y
seguir dando largas con la excusa de que tienen que hacer nuevos estudios.
Desde que iniciamos las negociaciones en noviembre del año pasado han tenido
tiempo más que suficiente, así que todo lo que se salga de una respuesta
satisfactoria supondrá la convocatoria de una huelga no solo en el aeropuerto
malacitano, sino en los del resto de Andalucía porque en esta lucha vamos todos
a una», advirtió Maté.
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