El equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Málaga aprobó el pasado miércoles, en la comisión de Urbanismo, los convenios urbanísticos de Arraijanal y La Térmica, con los que se permitirá la construcción de viviendas en sendos parajes, a pesar de que existen serias dudas respecto a la definitiva inclusión de estas actuaciones en la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) de la ciudad.
De un lado, la Junta de Andalucía ya ha mostrado su rechazo rotundo en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) a la posibilidad de construir en los suelos situados junto a Guadalmar, y de otro, la ocupación de la parcela de la antigua central térmica está a la espera de recibir el visto bueno de Aviación Civil.
A pesar de ello, los populares dan un paso adelante y formalizarán los citados acuerdos, que le reportarán a las arcas municipales unos 86 millones de euros. No obstante, el cobro de esta cuantía está supeditado a que las empresa Vallehermoso pueda ejecutar 664 viviendas en la zona de Arraijanal y Nueva Marina Real Estate otras 773 en La Térmica, al tiempo que dispondrá de 10.500 metros para un hotel, 12.000 para oficinas y 16.148 de comercial. A estos dos convenios se suma un tercero, el de Hipercor, que también recibióluz verde.
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